Durante el embarazo, leemos, se recomienda no comer roquefort (entre muchas otras cosas). Quienes conocen las preferencias gastronómicas de la madre saben el terremoto que eso supone en los menús de esta casa. El padre, por su parte, siempre supo que ese queso tenía que ser venenoso.
miércoles, 25 de abril de 2007
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
4 comentarios:
Queso no apto para menores, ya lo sabía yo, por eso la juvenil tía tampoco lo come. Cuánto lo siento... los sacrificios que tiene que hacer una madre por sus hijos... jaja
Hay muchas cosas ricas que hay que evitar, como el jamón serrano, el salmón, la carbonara... Pero confieso que lo que más extrañaré será el roquefort. Qué le vamos a hacer.
Bueno, lo importante son los alimentos SANOS. Las frutas, las verduras, etc...
Y más importante todavía es enseñarle luego a los niños a tener un buen paladar.
un buen paladar que por supuesto incluya el roquefort!
Publicar un comentario