Duelo

Después de casi un año de cuidados, después de que habíamos conseguido que una nueva generación de gusanitos de seda comenzara un nuevo ciclo, después de que habíamos logrado que unos cincuenta gusanos prosperaran y comenzaran a crecer gracias a las hojas de morera frescas que les dábamos cada día,  unas miserables hormigas se metieron a la caja de cartón en la que vivían y se los comieron todos, absolutamente todos.  Fue como si hubieran desaparecido por arte de magia, sin dejar rastro.

La familia al completo se puso muy triste, pero obviamente la más afectada fue Camila, que cuando se enteró estuvo un buen rato llorando desconsolada sin entender por qué.
 
Definitivamente es el primer duelo que ha tenido que pasar.  Camila se puso triste cuando se enteró de que Viruta en realidad se había muerto, y todavía la recuerda con nostalgia y le gusta verla en fotos, pero esto de los gusanos ha sido diferente, y aunque le explicamos que la naturaleza es así (the Darwin way of life),  que los gatos comen ratones y las hormigas gusanos (entre otras cosas), la sensación de injusticia no será fácil de olvidar.  

 

In memoriam

Papá

El papá se fue de viaje casi 20 días. Es la primera vez que nos separamos tanto tiempo y desde  el  comienzo sabíamos que iba a ser muy extraño.  El día antes de que se fuera, Camila se puso muy triste y lloró y lloró, diciendo que quería mucho a su papá y que no quería que se fuera.  Le dijimos que las separaciones son buenas y también sirven para que uno se da cuenta de lo mucho que quiere a las personas,  que son pocos días, que por ejemplo cuando ella iba a cumplir dos años la mamá se fue a Estambul una semana y Camila se quedó con el papá y no pasó nada...
Ya en la noche y todavía muy sensible, dijo "es que cuando yo tenía dos años no los quería tanto, pero ahora los quiero muchísimo".

Ya han pasado casi 15 días y efectivamente hemos comprobado lo mucho que queremos a Papá.

Sentir

En las últimas dos semanas la panza casi se ha duplicado y la mamá ya se ve como una embarazada de verdad verdad, pero lo más bonito de todo es que el bebé ya es tan grande que sus movimientos comienzan a sentirse.  La mamá está feliz, pues sentirlo le da una nueva dimensión a la relación con el bebé, y Camila también, pues aparte de que es una especie de primer contacto con su hermanito,  para ella significa que "ya faltan menos días para que nazca".

Ciclo completo

Ayer vimos que habían aparecido las primeras hojas en los árboles de morera y llegamos a casa a revisar los huevitos de gusano de seda que guardamos el año pasado en una caja de cartón.  Qué sorpresa nos llevamos al ver unos cinco gusanitos negros, más pequeños que granos de arroz basmati, moviendo sus cabecitas brillantes.  Papá fue de inmediato al parque a traerles hojas frescas y un par de horas después ya había más de veinte gusanitos comiendo y comiendo (suponemos que el olor los hizo salir).  Acabamos de repasar las fotos del año pasado y realmente es increíble lo enormes que llegan a ser. El ciclo comienza de nuevo...  ¿Alguien quiere gusanos?

Es niño

El bebé es un niño, y todos muuuuuy contentos. Todavía no hay acuerdo sobre el nombre, pero hoy fuimos a comprarle su primera camiseta y el acuerdo fue total.

Bélgica

Después de muchos años planeándolo, por fin fuimos a Bélgica a visitar a los primos y los primitos. Fue una semana de vacaciones en toda regla, como no teníamos hace mucho: paseos, comida rica, charlas interminables y muchas risas.  Realmente nos trataron como reyes. Nos tocó la pascua en el país de los chocolates (y de las patatas fritas, y de la cerveza...) y Camila se entendió muy bien con Laura y Mateo, que son un encanto. Dejamos aquí unas fotos (las últimas dos las tomó Camila y nos encantaron).

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