Una infección urinaria tuvo a Jacobo en el hospital cinco días. Nos llevamos un buen susto, pero por suerte lo llevamos cuando aparecieron los primeros síntomas y el tratamiento fue efectivo. Aparte de la fiebre, Jacobo estuvo todo el tiempo de buen ánimo y comiendo y durmiendo de maravilla, casi mejor que en casa, aunque el pobre se llevó unos cuantos pinchazos.
Camila estuvo muy pendiente de su hermanito y se portó muy bien estos días. Ayer cuando volvió del cole se llevó una gran sorpresa al encontrarnos aquí.
1 comentario:
¡Qué felicidad volver a casa! Se ve en la cara de Camila y se oye en la voz de los papás. Nos alegramos mucho.
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