domingo, 15 de junio de 2014

10 meses


Y Jacobo cumplió diez meses. Está hecho un gateador profesional y ya avanza de pié empujando cualquier cosa que resbale: sillas, el cochecito de Pocoyó, una caja llena de juguetes, la mesa de juegos... Un par de veces ha soltado las manos y se ha quedado de pie solito, pero todavía se asusta. Lo que sí aprendió ya es a subir escaleras y a bajarse de la cama de los papás. Todavía no dice ninguna palabra con sentido, pero grita y se ríe como loco, sobre todo con su hermanita (hay días que no entendemos por qué se ríe tanto con las cosas que ella le hace, desde simples miradas a bailar dando vueltas o caminar en cuatro patas).

El juego estrella de estos días ha sido el de los cambuches. Camila los construye con los cojines del sofá, el tapete de juegos, mantas y todo lo que encuentra a mano.  Invaden media sala y lo dejan todo muy desordenado, pero se divierten un montón.


Jacobo sigue comiendo más o menos bien y durmiendo un poco mejor, aunque al final siempre amanece en  la cama de los papás. Esta semana ha hecho mucho calor así que se baña un par de veces al día (le encanta el agua) y se lo pasa en body o incluso sólo con pañal, como en esta última foto con su amigo el león.


1 comentario:

Abuelita Tata dijo...

Ay, mis bellos chiquitines. Ya jugaremos a los cambuches, es un juego muy chevere. Y mi Jacobo, ya comenzaremos con algunas palabritas.